martes, 2 de septiembre de 2014

La Crítica del Mes (Septiembre 2014): Personas con síndrome de sobrealusión

Supongo que todos ustedes ya sabrán más o menos de lo que voy a hablar este mes teniendo en cuenta el título. Para los que no sepan de lo que hablo o, simplemente, no quieran pensar mucho, se los voy a intentar explicar de una forma breve y sencilla. Imaginemos que nosotros ponemos cualquier pollada que se nos ocurra y/o nos pase por alguna red social o blog (todos lo hemos hecho, en mayor o menor medida). Todo risas y fiestas, que si jijiji por aquí, que si bromas por allá... Todo va de buen rollo hasta que una persona (sí, UNA persona de entre todo el mundo) viene a quejársete de que lo que has publicado le ofende y que te va a denunciar cuando ni siquiera se le nombra en ningún sitio, al menos no de forma intencional. Lo más probable es que ésta persona no sólo sea una llorica e insoportable que no tenga nada mejor que hacer con su vida, sino que además se ha ganado el odio popular por éste tipo de acciones y otras muchas más.

Durante los más de dos años que llevo creando contenido para Internet, ésto me ha pasado varias veces. Algunas veces teniendo razón (puesto que se le nombraba directamente), otros no. A los que han tenido razón les he pedido disculpas, pero a los que no... Dejémoslo en que mi tiempo es muy valioso para perderlo en tamañas gilipolleces. Sin embargo, sé que no soy al único que le pasa, pues otras muchas personas han tenido sus rifirrafes por estos asuntos y algunos han llegado incluso a juicio, pero por cuestiones algo más graves que una simple sospecha de alusión. ¿A dónde quiero yo llegar con todo ésto? Pues que éstas personas lo único que quieren es llamar la atención, hacerse las víctimas para que el mundo les compadezca y, de paso, hundir a una persona por el simple motivo de no caerle bien. Suelen ser personas bastante inmaduras que no cogen el concepto simple a la par que efectivo para obtener la paz con respecto a esas personas:

"Si por algún motivo no te cae bien una persona, no te metas en su vida para sacar más mierda de la que le metiste en su momento".

Porque si, vale, una cosa es que puedas odiar a una persona, pero no hay mayor cachetada que ignorarle. Y no sólo te ahorras sentirte mal y ofendido por cosas por las que te puedas sentir aludido, sino que todo el mundo será más feliz sin oír tus lloriqueos. Y además, si lo que se supone que te están diciendo es mentira, ¿por qué te sientes aludido? No he oído refrán más acertado y bonito en mi vida que el que reza: "Quien se pica, ajos come". Si no lo entienden, quiere decir que los aludidos se sienten heridos porque saben, en el fondo, que lo que se "dice" de ellos es completamente cierto. 

Yo dejé de preocuparme por gente así hace mucho tiempo. No sólo les falta la razón y se meten donde no les llaman, sino que piensan que todos debemos actuar y pensar como ellos quieren y piensan que se nos intimida usando una herramienta que no sólo está fuera de su alcance (monetariamente hablando sobre todo), sino que no se pararán en ningún momento a mirar teniendo cosas más importantes que juzgar como robos, asesinatos y demás zarandajas (y eso lo hacen mal, imagínense una nimiedad como ésta). Por último, cabe destacar que éste tipo de gente son la menos indicada para realizar denuncias. Al margen de que yo no crea en los cuerpos de seguridad impuestos por el Estado, éstas personas serían capaces de denunciar a una cucaracha por volar enfrente de su casa a las 3 de la mañana haciendo ruido, así que yo no me tomaría muy en serio a éste tipo de personas.

En resumen, señores, ustedes sigan con sus vidas y pasen de éstos personajes. Como bien he dicho, no hay mayor bofetón en la puta cara que la ignorancia. Dicen que el tiempo pone a la gente en su lugar, y por experiencia sé que éstas personas suelen acabar solas y amargadas (si algunas lo están ya, pues más aún), así que no se molesten en hacerles caso o plantarles la machanga, es contraproducente. Así que háganme un favor y...

¡Sonrían! (Vale, estoy desarreglado, sin afeitar y con las gafas cambadas, pero me la suda enormemente. Estoy en mi casa y al que lo quiera coger, que lo coja)

Así acabo la sección de éste mes y comienza el tercer año de la misma. Espero que hayan pasado un buen rato leyendo ésto a la par que comprobando que éste tipo de personas existen desgraciadamente y...

¡Hasta la próxima!

No hay comentarios:

Publicar un comentario