Disculpen que no les brinde ni les haya brindado hasta la fecha el cuarto capítulo de Cronotaxia. Los motivos son simples, aunque algo absurdos. Básicamente me han faltado dos cosas que considero importantes a la hora de crear algo: tiempo e inspiración. No sé por qué, pero mi mente se ha bloqueado en el punto en el que concluyó el Capítulo 3. He avanzado un poco en mi libreta de creaciones sobre la historia, pero nada muy destacable.
También he de decir que llevo una muy mala semana, y anoche acabó rematándose el asunto. No sé como sentirme, no sé por qué estoy así y no sé qué pasa. No me pregunten, ni aquí ni en persona. No quiero quejas de nadie por decir cómo me siento. No me voy a aislar, no voy a dejarles sin mi humor y mi sonrisa... Pero estoy luchando en silencio, como debe ser. Afrontando las cosas por mí mismo y sin pagarlas con nadie más. Solo yo soy dueño de mí mismo y de lo que pase de mi cabeza para adentro y por tanto yo debo enfrentarme a ello.
Nada más. Gracias por entenderlo, espero que las cosas mejoren pronto y ojalá pueda traerles pronto cosas nuevas al blog.
Bienvenido seas, querido lector. Mientras que la vida y la gente no aportan más que ruido y problemas, aquí encontrarás un rincón donde pensar, meditar y reflexionar. Disfruta de tu estancia en mi pequeño reino.
Música, mi colega
domingo, 27 de octubre de 2013
Radio Forellia, 27/10/13
Ahora pueden acceder a TODOS los programas a través de la pestaña "Emisiones de Radio Forellia" situada arriba, bajo el nombre del blog. Cuando estos, por A o por B, fueran borrados, no hay de qué preocuparse. Todas las emisiones están a su vez grabadas como vídeos de YouTube, por lo que se sustituiría la pista borrada por su homónima en dicha página.
Espero que les guste y muchas gracias por estar ahí.
sábado, 19 de octubre de 2013
Forelli Analiza Nº 2: American History X
No soy un hombre que suela pararse a ver películas o series. No porque no me guste hacerlo, sino porque suelo estar siempre de aquí para allá, y cuando me paro paso el tiempo con el blog, la radio, YouTube o las videojuegos. Sin embargo, de vez en cuando disfruto de una película o de una serie (Es más, me estoy viendo Breaking Bad, fíjense si es buena que le busco tiempo y todo), y la disfruto muchísimo mas si las veo con alguien, generalmente mi señora o mis amigos.
Cuando visito a mi gran amigo Enrique, pasamos el tiempo haciendo el pinga hasta que llega la noche. En ese instante, buscamos una película que nos interese ver a los dos y la vemos. Desde entonces hemos visto de todo: humor con "Colega, ¿Donde está mi coche?", suspense y thriller con la genial película "El efecto mariposa" protagonizada también por Ashton Kutcher... Ésta vez decidimos ver un clásico de finales de los noventa que desde hacía un tiempo sonaban en nuestras cabezas pero por los motivos que ya he comentado no he podido pararme a hacerlo, y ese filme no es nada más y nada menos que American History X.
Derek Vinyard, un neonazi californiano de no más de 16-18 años, se percata de que tres negros están robándole el coche y mata a dos de ellos. Por ello, es encarcelado durante tres años en la prisión del Estado. La misma semana en la que Derek termina de cumplir condena, un profesor se queja al director del instituto de Danny Vinyard, su hermano, de que éste realizó un trabajo hablando y defendiendo los ideales que Hitler expusiera en su día en el famoso libro Mein Kampf. A partir de ahí, el director (que es negro, para más inri) empieza a darle unas clases privadas a Danny, una asignatura llamada Historia Americana X (de ahí el nombre de la película), y su primer trabajo es escribir sobre cómo afectó a su vida el encarcelamiento de su hermano. Derek sale de la cárcel y, al ver que su hermano sigue por el mismo camino que le llevó a prisión, decide tomar medidas...
Todo lo que dicen de esta película es absolutamente cierto: es una maldita obra de arte. No sólo trasmite un mensaje antiracista y antinazista sin recurrir al punto de vista patriótico que se suelen dar muchas producciones estadounidenses, sino que lo hace de una forma humana, cercana, de tal forma que parece que lo contado en la pelicula haya sucedido en nuestros respectivos barrios, reflejando sin necesidad de mostrar grandes cantidades de sangre en ningún momento la violencia, el odio, las falacias y las violaciones que suceden en la historia.
Un gran filme que quiere hacernos entender que el odio no hace más que generar más y más odio y que la vida es muy corta para pasarla cabreado, y menos siguiendo unos ideales que no surgen del propio racionamiento sino de la labia y la demagogia de unos pocos (en el caso de la película, todos los neonazis de la localidad de Venice son liderados por un señor mayor llamado Cameron que les tiene a todos manipulados). Sin embargo, también me gustó que trataran los temas de la hipocresía que se tiene con respecto a los miembros de otras razas social y legalmente hablando, todo en aras de favorecer a las personas de otras etnias y evitar los típicos comentarios de "lo encerraron por ser negro" y también en desmentir el mito de que "los negros no pueden ser racistas", puesto que muchas veces los propios negros son más racistas que los blancos (que lo entiendo, puesto que el hombre blanco ha jodido al hombre negro por generaciones, pero deberíamos estar por encima de las rencillas históricas que sólo provocan que nuestras diferencias sean abismales. TODOS). Artísticamente también está genial, el sistema de flashbacks dispersos es algo que siempre crea intriga y expectación y, bien usados, hacen de una buena historia una genial historia. Además, para diferenciar el presente del pasado, nos los ponen en blanco y negro, detalle que añade mucho más dramatismo a lo que ocurre en nuestras pantallas.
Alguien de mi público me dijo que no le gustó el final porque, según ella, pone como "ganador moral" a los nazis que se quejaban de los inmigrantes. Esto ya se lo dije a esa persona en privado, pero lo voy a expresar aquí por si se ven esta asombrosa producción algún día: Ese no es, ni de lejos, el mensaje que transmite el final. Lo que en realidad quiere expresar es, como dije al principio, que el odio no lleva a ninguna parte y, además, que no sólo el hombre blanco es racista y hace tremendas barbaridades a los que no son de su mismo color. Parafraseando a una frase promocional de un evento actual de DC Cómics: "El odio es relativo".
Los actores lo hacen simple y llanamente espectacular. Edward Norton consiguió dos premios por esta película y fue nominado a un Oscar. Éste hombre hizo un titánico esfuerzo, puesto que para dar el perfil de Derek Vinyard tuvo que ganar nada más y nada menos que 14 kilos de puro músculo. Sin embargo, no quiero quitarle mérito al resto del reparto que, junto con la ambientación y el argumento, provocaron que me sumergiera en la historia como si fuera un personaje más, de modo que aprendí a ver muchas cosas desde otro prisma y me morí de asco con todas las falacias que los nazis sueltan en sus discursitos.
Cuando visito a mi gran amigo Enrique, pasamos el tiempo haciendo el pinga hasta que llega la noche. En ese instante, buscamos una película que nos interese ver a los dos y la vemos. Desde entonces hemos visto de todo: humor con "Colega, ¿Donde está mi coche?", suspense y thriller con la genial película "El efecto mariposa" protagonizada también por Ashton Kutcher... Ésta vez decidimos ver un clásico de finales de los noventa que desde hacía un tiempo sonaban en nuestras cabezas pero por los motivos que ya he comentado no he podido pararme a hacerlo, y ese filme no es nada más y nada menos que American History X.
Título orginal: American History X Producción: USA, 1998 Género: Drama Duración: 118 minutos Dirección: Tony Kaye Intérpretes: Edward Norton, Edward Furlong |
Todo lo que dicen de esta película es absolutamente cierto: es una maldita obra de arte. No sólo trasmite un mensaje antiracista y antinazista sin recurrir al punto de vista patriótico que se suelen dar muchas producciones estadounidenses, sino que lo hace de una forma humana, cercana, de tal forma que parece que lo contado en la pelicula haya sucedido en nuestros respectivos barrios, reflejando sin necesidad de mostrar grandes cantidades de sangre en ningún momento la violencia, el odio, las falacias y las violaciones que suceden en la historia.
Un gran filme que quiere hacernos entender que el odio no hace más que generar más y más odio y que la vida es muy corta para pasarla cabreado, y menos siguiendo unos ideales que no surgen del propio racionamiento sino de la labia y la demagogia de unos pocos (en el caso de la película, todos los neonazis de la localidad de Venice son liderados por un señor mayor llamado Cameron que les tiene a todos manipulados). Sin embargo, también me gustó que trataran los temas de la hipocresía que se tiene con respecto a los miembros de otras razas social y legalmente hablando, todo en aras de favorecer a las personas de otras etnias y evitar los típicos comentarios de "lo encerraron por ser negro" y también en desmentir el mito de que "los negros no pueden ser racistas", puesto que muchas veces los propios negros son más racistas que los blancos (que lo entiendo, puesto que el hombre blanco ha jodido al hombre negro por generaciones, pero deberíamos estar por encima de las rencillas históricas que sólo provocan que nuestras diferencias sean abismales. TODOS). Artísticamente también está genial, el sistema de flashbacks dispersos es algo que siempre crea intriga y expectación y, bien usados, hacen de una buena historia una genial historia. Además, para diferenciar el presente del pasado, nos los ponen en blanco y negro, detalle que añade mucho más dramatismo a lo que ocurre en nuestras pantallas.
Alguien de mi público me dijo que no le gustó el final porque, según ella, pone como "ganador moral" a los nazis que se quejaban de los inmigrantes. Esto ya se lo dije a esa persona en privado, pero lo voy a expresar aquí por si se ven esta asombrosa producción algún día: Ese no es, ni de lejos, el mensaje que transmite el final. Lo que en realidad quiere expresar es, como dije al principio, que el odio no lleva a ninguna parte y, además, que no sólo el hombre blanco es racista y hace tremendas barbaridades a los que no son de su mismo color. Parafraseando a una frase promocional de un evento actual de DC Cómics: "El odio es relativo".
Los actores lo hacen simple y llanamente espectacular. Edward Norton consiguió dos premios por esta película y fue nominado a un Oscar. Éste hombre hizo un titánico esfuerzo, puesto que para dar el perfil de Derek Vinyard tuvo que ganar nada más y nada menos que 14 kilos de puro músculo. Sin embargo, no quiero quitarle mérito al resto del reparto que, junto con la ambientación y el argumento, provocaron que me sumergiera en la historia como si fuera un personaje más, de modo que aprendí a ver muchas cosas desde otro prisma y me morí de asco con todas las falacias que los nazis sueltan en sus discursitos.
Derek Vinyard (Edward Norton) en un momento clave del largometraje.
Aquí, junto a Seth Ryan (Ethan Suplee, actor que interpreta a Randy en la serie Me llamo Earl)
Danny Vinyard (Edward Furlong)
Esta película se lleva otro 10 sobre 10 , pues no es una película que en ningún momento pecase de pretenciosa y todos los méritos obtenidos y las enseñanzas impartidas por la misma dan un pie genial para filosofar acerca de temas como el racismo, la demagogia y el relativismo moral.
Muchas gracias por leer, espero que se animen a puntuar y comentar para así debatir y compartir opiniones, experiencias e impresiones. Me harían muy feliz.
¡Hasta la próxima!
Lo último de Radio Forellia
Recuerden que pueden aparecer en la radio escribiendo instantáneamente a mi Twitter (@MarcosJaguar96), a mi Facebook (Marcos Suárez Hernández) o al correo (RadioForellia@gmail.com)
Momentos Bizarros de mi Vida Nº 6, 2ª Parte: El perfecto día de chinos
Señores, voy a ser breve, puesto que realmente sólo tengo que decir dos cosas, quiero hacer un Forelli analiza esta misma noche y, además, empiezo a emitir en la radio a las 19:30 de esta misma tarde. Sólo decirles que he sacado nada más y nada menos que un 9,6 en el Test de chino (lo sabía, si es que soy Dios y lo demás son boberías).
Esto me ha animado a realizar una nueva sección para Youtube. Aún no tiene nombre, pero consistirá en enseñar chino para que la gente deje de tenerle ese miedo y esos prejuicios que normalmente la gente suele encerrar. No es una lengua muy difícil, pero sí numerosa como su puta madre.
¡Hasta ahora en Radio Forellia!
viernes, 18 de octubre de 2013
Momentos Bizarros de mi Vida Nº 6, 1ª Parte: Un día de chinos
Bien, hoy he tenido el que se puede considerar mi primer parcial. En este caso, ha sido de Chino. "Forelli, eso tiene de bizarro lo que yo de Belieber". La cosa no sería tan rara si durante el día no hubiesen pasado según qué cosas. Hélas aquí:
Primero, hoy me he pasado la mañana fuera de casa. Mi madre tenía que hacerse una prueba en el Negrín, por lo que, para variar, decidí acompañarla. Salía un poco de casa, leería algo de Juego de Tronos, repasaría Chino... y también me ahorraba un viaje de guagua (así me dura más el bono) y una buena comida fuera de casa.
Tras salir del Doctor Negrín (Hospital bastante importante, por no decir el único, de la isla de Gran Canaria), nos dirigimos en busca de un restaurante para comer. Propuse comer en un restaurante chino, pues desde que fuí a Elche no había comido nada de comida china, y encima lo de estudiar dicho idioma y no poder comer su comida me estaba poniendo los dientes largos... Total, que mi madre, por motivos de salud, prefirió ir a Las Cumbres Canarias, exquisito restaurante especialista en carnes de vacuno y porcino.¿Qué pasó? Sorpresa: Da la casualidad de que el restaurante estaba aún cerrado. Debido a que disponíamos de un tiempo relativamente corto para comer, decidimos buscar otro sitio. Al ver que era lo único abierto, terminamos entrando en un restaurante chino. Sí, así soy yo. No sé como mierda lo hago, pero muchas veces consigo lo que me propongo sin darme cuenta siquiera. Seguramente el Karma, Superman, Dios, Yo mismo o como tú quieras llamar al dios en el que creas (o en el que no) vela por mí muchas veces.
La cosa es: Soy Forelli y a donde voy la armo. Ésta no es una excepción. Entramos y tomamos asiento para proceder a pedir. Cuando nos preguntaron por la bebida, tuve los cojones de pedirle agua a la camarera... ¡En chino! ¿Y que fue lo guapo? ¡Que me entendió y me dijo que pronuncio muy bien! Con eso me quedó claro que tenía el temario del examen lo suficientemente asimilados como para usarlo en la vida cotidiana (que tampoco es mucho: saludar, preguntar como está el otro, pedir agua, café y mierdiCola... Pero me defiendo). La comida me supo a gloria. Echaba de menos el pollo con champiñones, los tallarines con ternera, el pan chino, el de gambas... Pero hubo una cosa que me hizo bastante ilusión y me trajo recuerdos. Un plato llamado Nido de golondrinas (una especie de tiras de pan de gambas concentrado formando algo parecido a un nido de pájaro con el interior lleno de carnes y verduras varias con salsa). La comida simplemente estuvo genial. Créanme que desde la una de la tarde sigo lleno, y son casi las doce de la noche...
Total, que llego a clase y, tras dar dos horitas de Mitología y dos de Inglés, llega el aclamado por unos y temido por otros examen de Chino. Examen que era una auténtica chorrada (también puede ser que hemos dado poquito), pero no sé si fue por lo ocurrido en el restaurante chino o por la comida en sí, me salió el examen de cine.
Espero que pronto me den la nota para ponerles la segunda parte y terminar de partirnos el culo un rato. Si apruebo con mucha nota, adelantaré un nuevo vídeo...
Primero, hoy me he pasado la mañana fuera de casa. Mi madre tenía que hacerse una prueba en el Negrín, por lo que, para variar, decidí acompañarla. Salía un poco de casa, leería algo de Juego de Tronos, repasaría Chino... y también me ahorraba un viaje de guagua (así me dura más el bono) y una buena comida fuera de casa.
Tras salir del Doctor Negrín (Hospital bastante importante, por no decir el único, de la isla de Gran Canaria), nos dirigimos en busca de un restaurante para comer. Propuse comer en un restaurante chino, pues desde que fuí a Elche no había comido nada de comida china, y encima lo de estudiar dicho idioma y no poder comer su comida me estaba poniendo los dientes largos... Total, que mi madre, por motivos de salud, prefirió ir a Las Cumbres Canarias, exquisito restaurante especialista en carnes de vacuno y porcino.¿Qué pasó? Sorpresa: Da la casualidad de que el restaurante estaba aún cerrado. Debido a que disponíamos de un tiempo relativamente corto para comer, decidimos buscar otro sitio. Al ver que era lo único abierto, terminamos entrando en un restaurante chino. Sí, así soy yo. No sé como mierda lo hago, pero muchas veces consigo lo que me propongo sin darme cuenta siquiera. Seguramente el Karma, Superman, Dios, Yo mismo o como tú quieras llamar al dios en el que creas (o en el que no) vela por mí muchas veces.
La cosa es: Soy Forelli y a donde voy la armo. Ésta no es una excepción. Entramos y tomamos asiento para proceder a pedir. Cuando nos preguntaron por la bebida, tuve los cojones de pedirle agua a la camarera... ¡En chino! ¿Y que fue lo guapo? ¡Que me entendió y me dijo que pronuncio muy bien! Con eso me quedó claro que tenía el temario del examen lo suficientemente asimilados como para usarlo en la vida cotidiana (que tampoco es mucho: saludar, preguntar como está el otro, pedir agua, café y mierdiCola... Pero me defiendo). La comida me supo a gloria. Echaba de menos el pollo con champiñones, los tallarines con ternera, el pan chino, el de gambas... Pero hubo una cosa que me hizo bastante ilusión y me trajo recuerdos. Un plato llamado Nido de golondrinas (una especie de tiras de pan de gambas concentrado formando algo parecido a un nido de pájaro con el interior lleno de carnes y verduras varias con salsa). La comida simplemente estuvo genial. Créanme que desde la una de la tarde sigo lleno, y son casi las doce de la noche...
Total, que llego a clase y, tras dar dos horitas de Mitología y dos de Inglés, llega el aclamado por unos y temido por otros examen de Chino. Examen que era una auténtica chorrada (también puede ser que hemos dado poquito), pero no sé si fue por lo ocurrido en el restaurante chino o por la comida en sí, me salió el examen de cine.
Espero que pronto me den la nota para ponerles la segunda parte y terminar de partirnos el culo un rato. Si apruebo con mucha nota, adelantaré un nuevo vídeo...
¡Hasta la segunda parte!
martes, 15 de octubre de 2013
La Crítica del Mes (Octubre 2013): Esas gorras que no tienen sentido estético maldito
No soy una persona de modas. No me gusta cambiar mi forma de vestir, actuar o pensar por el sólo hecho de que la gente (o mejor dicho, los medios, puesto que la gente no piensa por sí misma) cambie dichos aspectos como el que se cambia de calzoncillos sin criterio alguno. Sin embargo, cada uno es libre de hacer las cosas como quiera, siempre y cuando no impidan a los demás hacer lo propio. Es por ello que no me quejo de las prendas que lleve la gente, aún cuando no es de mi estilo. Pero hay una prenda en especial que no entendí, no entiendo y jamás entenderé...
Las gorras con visera plana
Recuerdo que no hace mucho las nombré un poco por encima, en el VOT que hablaba sobre las modas... Pues ahora me toca centrar mi odio visceral hacia esta aberración. Recuerdo que hasta hace muy bien poco, una gorra era algo que se ponía en la cabeza, con la función de desviar los rayos de sol que caían directos a los ojos y así poder ver sin temor a ser deslumbrados. Para eso y para otra cosa más que comentaré a continuación, las viseras eran fabricadas con un diseño curvo, tal que así:
El guionista y Jefe Creativo de DC Cómics Geoff Johns, revolucionario que pegó un puñetazo sobre la mesa en series como Green Lantern, Justice League o Superman, luciendo una gorra NORMAL.
Pues bien, junto con esa moda de hipsters gamers y bebedores masivos de veneno legal Monster vino inherente las gorras de visera plana, que se caracterizan por tener las viseras igual que el tórax de Keira Knightley.
Así las ve un Hipster de mierda sin personalidad hambriento de aprobación social.
Así las veo yo.
Y la cosa es: ¿Por qué le tengo este odio casi irracional, sólo comparado al coraje que me da ese saltimbanqui africano que lucha en la WWE bajo el nombre de Kofi Kingston? Pues por varios motivos:
- Estas gorras son antiestéticas. Parecen como si el que las lleva tuviera incrustada en la cabeza una plancha de metal lanzada a una velocidad de 500 m/s y de milagro, en vez de arrancarle medio cráneo, se les queda clavado en la frente.
- Son caras como su puta madre. Las he visto por ahí rondando entre los 40 y los 80 euros. ¿Y todo por qué? Por ser de marca. Y hay algunas marcas que a mí me daría vergüenza ajena llevar, como la ya nombrada Monster o esa que ha aparecido de aquí a hace un tiempo llamada OBEY. Llevar escrita la palabra "Obedece" en inglés en la frente me hace pensar muchas cosas. Entre ellas, que el que lo lleva es tonto del culo.
- Hay un puñado de gorras de este tipo que tienen temática de superhéroes, lo que las hace fáciles de adquirir para esa clase de hipster que odio mucho y al que me voy a dar la libertad de llamarlo "pseudofriki": Ese que viste camisetitas de Green Lantern y gorras de Batman (lo que de por sí es ya una desfachatez, pues Batman y Green Lantern jamás se han llevado bien) y luego les halagas por la camiseta y te dicen: "Sí, son personajes de Marvel". ¿De Marvel, imbécil? ¡¿DE MARVEL?! ¡¡SON DE DC, TONTO DE LOS COJONES!! ¡¡HAZME EL PUTO FAVOR DE SUICIDARTE AQUÍ MISMO!!
- No son nada funcionales. Como dije antes, las gorras son para protegerse del sol, y de ahí que las gorras tengan una visera curva. ¿Para qué? Fácil, para que sólo una porción de los rayos rebote directamente en la gorra y los demás resbalen hacia los costados de la visera, evitando así que el gorro y, por ende, la cabeza resulten achicharrados cual judío en Auschwitz. Las de visera plana lo que hacen es dejarte la cabeza como el hierro fundido de un alto horno. La cosa es aplicar la lógica.
- Son muy restrictivas. ¿Qué quiere decir esto? Que sólo se las pueden poner unos pocos, al tener una talla específica. No son como las gorras de toda la vida, que tienen diferentes mecanismos en la parte trasera para adaptarlos a distintas cabezas de distintos tamaños (pues no todos tenemos el mismo coco y, en mi caso particular, soy un cabezón de miedo). Las de visera plana son rígidas como el coño de una muerta, no se doblan ni con un puñetazo de Superman, Invencible, Omni-Man y Thragg juntos. Es decir, para eso me compro un casco de moto, joder, que es más estético.
Pues bien, éstos son mis motivos para odiar esa mierda. Les animo a comentar su punto de vista para favorecer el debate y avivar un poco el tema.
¡Hasta la proxima, señores!
domingo, 13 de octubre de 2013
Frikismo Innato Special Nº 1: Rob Mierdifeld, el tío que hirió de muerte al cómic
Bien sabe todo lector del blog que en este sitio es muy normal encontrar artículos protestando por las millones de injusticias y desigualdades que la especie humana y, sobre todo, el concepto de "sociedad" y "capitalismo" hacen en la humanidad junto con las mierdas más aleatorias que se puedan imaginar. Tengo un poco de todo en éste, mi rincón de la red, aunque hay uno al que siempre le he dedicado un gran cariño y esfuerzo: el mundo del cómic americano (Caslo, no lo hagas, ya lo hago yo: ESTADOUNIDENSE). Es un mundo que me ha cautivado desde niño y que ahora, de adulto, he podido ver mucho más de cerca y entender muchas cosas que hace años, debido a mi niñez, no podía. Una de ellas eran los cómics de la época de los noventa. De pequeño leí un crossover que por el nombre parecería épico, pero que, por A o por B, realmente no lo fue tanto: Marvel VS DC, un evento ideado por las dos grandes casas del noveno arte para combatir el éxito que la recién fundada Image Comics estaba teniendo gracias a las series que creaban los "artistas" de moda de la época. ¿Se imaginan cuán jodidas tenían que estar las otras dos para ponerse de acuerdo con algo?
En aquella época la gente había dejado de comprar cómics porque habían perdido su magia. En aquella época vino una generación de artistas cuanto menos polémicos. Hubo algunos regulares como Jim Lee y Whilce Portacio, otros excelentes como Adam Kubert, John Romita Jr y Todd McFarlane, algunos bastante malos... Pero nadie más apestoso y polémico que Robert "Rob" Liefeld.
Nacido en Anaheim, California (EEUU) el 3 de Octubre de 1967, empezó a "amar" a los cómics desde el instituto. Hizo algunos cursos de arte básico y asistía a convenciones de cómics en el DisneyLand Hotel, donde conoció a grandes del medio como George Pérez o Marv Wolfman. En una entrevista citó que George Pérez, John Byrne y Frank Miller eran sus mayores influencias a la hora de plagiar dibujar.
Entró al negocio en 1988 con una serie limitada de Halcón y Paloma para DC Cómics. Ya por entonces empezó a dar problemas. Poco después dibujaría un Annual en Amazing Spider-Man. En 1989 empieza a dibujar la serie Nuevos Mutantes en su número 86 junto a la guionista Wezzie Simonson. Éste dúo no se llevaba nada bien, pues la escritora quería que su serie fuese sobre unos chicos mutantes que luchaban contra el malo de turno y volvían a la mansión, con una idea de inocencia propia de muchachos de esa edad. Liefeld no, él quería que los chicos madurarar y se convirtieran en una patrulla de asalto sanguinaria, en orden a la moda de aquella época de oscurecer hasta límites insospechados a sus figuras más icónicas. Entre las fuertes discusiones entre ellos dos y el director de la serie no conseguía pararle los pies, Simonson acabó abandonando la serie en su número 98.
En unos pocos números podemos ver que su intención es hacer una especie mezcla de película barata de acción y un manga de esos mierdosos postapocalípticos: Tías con un buen par de tetas, tíos hipermusculados (muchísimo más de lo normal en el medio), explosiones, armas del tamaño de coches... Incluso un cambio totalmente gratuito de nombre a X-Force. Sin embargo, vale más una imagen que mil palabras, por lo que voy a ponerles unas imágenes de dicha serie (y de paso, el resto del Special) tras el salto:
En aquella época la gente había dejado de comprar cómics porque habían perdido su magia. En aquella época vino una generación de artistas cuanto menos polémicos. Hubo algunos regulares como Jim Lee y Whilce Portacio, otros excelentes como Adam Kubert, John Romita Jr y Todd McFarlane, algunos bastante malos... Pero nadie más apestoso y polémico que Robert "Rob" Liefeld.
Sólo hay que ver la cara de retrasado que tiene... |
Entró al negocio en 1988 con una serie limitada de Halcón y Paloma para DC Cómics. Ya por entonces empezó a dar problemas. Poco después dibujaría un Annual en Amazing Spider-Man. En 1989 empieza a dibujar la serie Nuevos Mutantes en su número 86 junto a la guionista Wezzie Simonson. Éste dúo no se llevaba nada bien, pues la escritora quería que su serie fuese sobre unos chicos mutantes que luchaban contra el malo de turno y volvían a la mansión, con una idea de inocencia propia de muchachos de esa edad. Liefeld no, él quería que los chicos madurarar y se convirtieran en una patrulla de asalto sanguinaria, en orden a la moda de aquella época de oscurecer hasta límites insospechados a sus figuras más icónicas. Entre las fuertes discusiones entre ellos dos y el director de la serie no conseguía pararle los pies, Simonson acabó abandonando la serie en su número 98.
En unos pocos números podemos ver que su intención es hacer una especie mezcla de película barata de acción y un manga de esos mierdosos postapocalípticos: Tías con un buen par de tetas, tíos hipermusculados (muchísimo más de lo normal en el medio), explosiones, armas del tamaño de coches... Incluso un cambio totalmente gratuito de nombre a X-Force. Sin embargo, vale más una imagen que mil palabras, por lo que voy a ponerles unas imágenes de dicha serie (y de paso, el resto del Special) tras el salto:
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viernes, 11 de octubre de 2013
Forelli Analiza Nº 1: Invencible Ultimate Collection Vol.1
Nombre: Image Ultimate Collection Vol.1 Autores: Robert Kirkman, Cory Walker, Ryan Ottley Edición: Cartoné, 400 páginas en color Editorial: Aleta Ediciones/ Dolmen Editorial Precio: 34,95 euros |
Ya entrados en materia, quiero soltarles el nombre de Robert Kirkman. Posiblemente no les suene demasiado, pero éste hombre es uno de los mejores y más prolíficos guionistas de la presente época. Sin irme muy lejos, la serie televisiva que tan de moda está y que a tanta gente le mola, The Walking Dead, está basada en la serie de cómics homónima creada por este señor. Ahora quiero centrarme en Invencible, una obra contemporánea de la famosa cabecera de zombies y no tan conocida en este lado del Atlántico.
Mark Grayson es un chico normal y corriente: Va al instituto, sale con sus amigos, trabaja en la hamburguesería de su barrio... Pero tiene algo que los demás no tienen: Un padre superhéroe. Nolan Grayson es conocido como Omni-Man, el mayor defensor mundial de la democracia y la justicia. Todo esto cambiará cuando Mark descubre que empieza a tener los mismos poderes que su progenitor. A partir de ese punto nada volverá a ser lo mismo...
Ustedes se estarán preguntando en sus cabecitas: "¿Más superhéroes? Esto ya está muy visto, va a ser lo mismo que leemos en cabeceras como Superman..." No, se equivocan. No solo no es lo mismo, sino que la serie en sí es una alegoría paródica al género superheroico. Hay muchas figuras que podemos relacionar con otros iconos del noveno arte, se explotan todos y cada uno de los tópicos que los cómics de ésta temática suelen tener (Por ejemplo, Mark Grayson tiene un carácter y unos problemas muy parecidos a los de Spider-Man, Omni-Man se asemeja bastante a un Superman algo más avejentado de lo normal, los Guardianes de la Tierra son una parodia muy clara de la Liga de La Justicia pre nuevo Universo DC, War Woman es una versión machona y lesbiana de Wonder Woman...). Sin embargo, no todo es una parodia. La historia, aprovechando los recursos que dispone, posee un trasfondo mucho más serio de lo que en principio puede aparentar. En el último tercio del volumen podremos ver uno de los que para mí es y será uno de los giros más sorprendentes e inesperados que he presenciado nunca en una obra literaria, algo que hará que nada vuelva a ser como antes.
La historia no es plana, aunque así al inicio pueda parecer. Esta cabecera va poco a poco construyendo su propio universo y va sufriendo cambios conforme pasan los números, cuál teorema de Heráclito y el fuego. Y no solo eso, sino que el propio dibujo va tomando fuerza y dureza conforme pasan los capítulos. Pasa de ser una inocente historia con problemas adolescentes a una epopeya de dioses en la tierra con sangre y puñetazos por doquier. Y al igual que la historia, los personajes tampoco son nada planos, van evolucionando al mismo ritmo que la historia de tal punto que un personaje no es y jamás volverá a ser igual a como era al principio del volumen.
Robert Kirkman hace un trabajo maravilloso con los guiones y Cory Walker cumple con creces en el dibujo, aunque para mí lo hace mejor Ryan Ottley, quien pasó a ser dibujante fijo de la serie a partir del número 7. Aleta Ediciones colabora junto con Dolmen Editorial para traernos un magnífico volumen con tapas cartoné, papel de calidad, tamaño épico al igual que el de la propia serie y una tochada de contenidos extra (bocetos inéditos, comentarios de los creadores, guiones totalmente detallados...) y todo al precio redondeado de 35 euros. Créanme, los vale y mucho. Si no me creen y no quieren gastarse el dinero sin saber lo que verán, les dejo de forma gratuita los números que vienen incluidos en el tomo y el lector para los mismos. Juzguen por ustedes mismos.
Yo por mi parte, lo califico con un 10 sobre 10. Les animo a que voten al final de la entrada, que den su opinión de si les gusta la sección e, incluso, dar su propio punto de vista sobre el cómic y dar su propia puntuación. Me gustaría que, para variar, esta entrada pueda ser un tópico que dé mucho de que hablar.
Ahora, tocan fotos (Tras el salto):
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Volumen 1
Forelli Analiza Nº 0: El inicio
Tras mucho pensarlo y haberlo hecho tema de encuesta recientemente en el blog, me he decidido a crear esta nueva sección. Para todo aquél que lleve leyendo mi blog cierto tiempo sabrá que tengo un apartado llamado Frikismo Innato, donde cojo a un personaje de cómic, película o videojuego (durante un tiempo también cogía de manga, pero la gente con ello despreciaba el resto de mi blog y, además, ya dejó de gustarme casi por completo), lo someto a un riguroso proceso de indagación sobre su nombre completo real, peso, estatura, aliaciones y motes conocidos, poderes... Luego doy mi punto de vista sobre dicho personaje y posteriormente pongo fotos varias para que la gente se deleite con el mismo. Sorprendentemente, sigue teniendo éxito tras nada más y nada menos que catorce números (dos de ellos cancelados, siendo aun así la segunda sección más longeva de The Voice Of Truth Is Here!). Sin embargo, quiero dar un paso más allá.
Esto no quiere decir que deje de hacer Frikismos, ni mucho menos. Esa sección es una de las que más interés suele suscitar al público y me encanta hacerlas, por lo que voy a mantenerlas. Simplemente que aquella se quedará como análisis de personajes y ésta será una nueva sección donde analizar los medios en donde salen.
Quiero dar las gracias a la gente por dejarme ver que la nueva idea de sección les levanta interés. Y lo de Caslo fue una Caslosada de azotea, pero sé que lo hace de buenas. No hace ni dos días que creé la encuesta y ha recibido 7 votos: 6 a favor de la sección, ninguno en contra y uno al que se la sudaba tanto que podía llenar una piscina para ballenas (Caslo), por lo que considero una victoria aplastante del Sí con un 86 por ciento. Lo dicho, muchas gracias por votar y por apoyarme. Para empezar bien, voy a analizar un cómic, pero no porque sea preferencia mía, sino porque es el campo en el que más me especializo, el que más a mano tengo ahora mismo y el que espero que les levante bastantes expectativas. El primer volúmen del que probablemente sea uno de los mejores cómics de superhéroes de la historia...
Entre hoy y mañana cae la sección, no se preocupen. No quiero hacerles esperar mucho. Y para serles sinceros, yo tampoco puedo esperar.
martes, 8 de octubre de 2013
Momentos Bizarros de mi Vida #5-S: 07 de Octubre de 2013, un día con mucha suerte
Ayer era lunes y la WWE había emitido el día anterior el PPV llamado Battleground, por lo que, como marca la tradición entre colegas, fuimos Cristian y yo a verlo en casa de Sarman... Con el propio Sarman, claro. Normalmente hacíamos esto por la tarde, pero hay un problemita: Yo por la tarde tengo clase y la madre del susudicho Sarman acapara el ordenador en cuanto llega, por lo que tenemos que ir los lunes por la mañana temprano a su casa.
Después de ver dicho programa y de descojonarnos lo típico con nuestras paridas llanoparrenses, me di cuenta de que me dejé mi almuerzo en casa: dos latas de mejillones en escabeche, unos panitos bizcochados para mojar y dos manzanas Fuji. Le pedí un poco de caridad a Sarman, por si podía ofrecerme algo para, más que sea, aplacar el hambre hasta por la tarde. En efecto, pudo darme un vaso de leche con Kaba (un colacao de vainilla bastante bueno) y salvado de trigo y un yogur de pastel de limón que se le caducada ese mismo día. Este fue el primer golpe de suerte del día. Después de seguir haciendo el pinga en la casa de Alex Sarman, fuimos al IES Guía (Sí, ese al que me fui y del que me marché, todo por culpa de una misma persona) para que ellos fueran a pedir el título de Bachiller y yo pasar, ver si alguna escoria de por allí me reconocía, escupir en la entrada y observar si había cambiado nada. En efecto, no escupí no una, sino dos veces en la entrada del instituto, la gente o no me vio, o no me reconoció, o no me quiso ver y, en efecto, no había cambiado NADA, excepto que habían más cuadros de "uuhu estamos orgullosos de ser campeones de un torneo de fútbol que no le importa a nadie". Segundo golpe de suerte.
Luego cogí la guagua, no sin antes hablar con mis amigos para ver que querían ir a Las Palmas un día conmigo, cosa que me honró mucho. Luego tuve un día bastante normalito, ni aburrido ni excesivamente divertido. Aprendí cosas, de hecho. Bueno, lo guapo es que recibí un mensaje de Facebook de Alexis Quintana, dueño de la tienda de cómics y camisas de metal Urban Comics, situada a unos cinco minutos andando desde la Facultad en la que estudio, diciéndome que ya le habían llegado las novedades de ECC (en este caso, las que me intere interesaban eran Liga de la Justicia y Green Lantern. Normalmente me hago Superman, pero ahora GL está costando más por una causa especial, por lo que hasta que vuelva la normalidad me veo obligado a renunciar a ella). Me sorprendo cuando el tío me ve entrando y me dice "Hey, tío, ¿viste que te mandé por Facebook que llegó ECC?" Y eso fue el principio de una larga conversación de 25 minutos en las que hablamos de las ediciones que realiza ECC, preferencias personales de cada uno, puesta en común de nuestra afición a Grant Morrison, comparación de tiendas... En definitiva, hace tiempo juzgúe mal a ese tio y en días como estos me arrepiento y me doy cuenta de muchas cosas, ya hablaré de esto en su respectivo FrikiAnálisis. Tercer golpe de suerte.
Yendo a coger la guagua, creí que iba a estarme solo durante el camino haciendo véte a saber qué (leyendome la Liga de la Justicia #18 o el Green Lantern del mismo número, jugando a Angry Birds...) Y cuál es mi sorpresa al ver que mi amiga Blanca, propietaria del blog In my Dreams You Will always Stay (sítio muy poético, tipo las cosas que le molan a mi señora Wonder Woman) va a ir en la misma guagua que yo. Así nos pasamos todo el viaje hablando y hablando, haciendo del viaje algo mucho más ameno. Cuarto golpe de suerte
Al llegar a la parada y despedirme de ella, voy a la máquina expendedora de la estación y voy a pillar uno de esos bocatas de paquete por 1,20 euros. Los meto, pulso el número del bocata y... Se quedó al filo, a punto de caer, pero estático. Me cagué en la puta y miré para atrás. Al ver que la guagua no salía aún, decidí agitar la máquina hasta que cayera mi bocadillo. Y cúanta fue mi suerte que no sólo cayó mi bocadillo, sino que también cayeron una chocolatina y un paquete de Skittles (o como mierda se escriba, nunca me han gustado). Al final me salió baratísimo todo. Quinto y último golpe de suerte del día.
En resumen, el día ha sido normal, pero ha tenido un aura de buen rollo y fortuna que me ha encantado, ha sido muy especial a su manera. Y tambien encuentro todo un poco raro, por lo que es merecedor de entrar en los anales de Momentos Bizarros.
¡Hasta la próxima bizarrada!
Después de ver dicho programa y de descojonarnos lo típico con nuestras paridas llanoparrenses, me di cuenta de que me dejé mi almuerzo en casa: dos latas de mejillones en escabeche, unos panitos bizcochados para mojar y dos manzanas Fuji. Le pedí un poco de caridad a Sarman, por si podía ofrecerme algo para, más que sea, aplacar el hambre hasta por la tarde. En efecto, pudo darme un vaso de leche con Kaba (un colacao de vainilla bastante bueno) y salvado de trigo y un yogur de pastel de limón que se le caducada ese mismo día. Este fue el primer golpe de suerte del día. Después de seguir haciendo el pinga en la casa de Alex Sarman, fuimos al IES Guía (Sí, ese al que me fui y del que me marché, todo por culpa de una misma persona) para que ellos fueran a pedir el título de Bachiller y yo pasar, ver si alguna escoria de por allí me reconocía, escupir en la entrada y observar si había cambiado nada. En efecto, no escupí no una, sino dos veces en la entrada del instituto, la gente o no me vio, o no me reconoció, o no me quiso ver y, en efecto, no había cambiado NADA, excepto que habían más cuadros de "uuhu estamos orgullosos de ser campeones de un torneo de fútbol que no le importa a nadie". Segundo golpe de suerte.
Luego cogí la guagua, no sin antes hablar con mis amigos para ver que querían ir a Las Palmas un día conmigo, cosa que me honró mucho. Luego tuve un día bastante normalito, ni aburrido ni excesivamente divertido. Aprendí cosas, de hecho. Bueno, lo guapo es que recibí un mensaje de Facebook de Alexis Quintana, dueño de la tienda de cómics y camisas de metal Urban Comics, situada a unos cinco minutos andando desde la Facultad en la que estudio, diciéndome que ya le habían llegado las novedades de ECC (en este caso, las que me intere interesaban eran Liga de la Justicia y Green Lantern. Normalmente me hago Superman, pero ahora GL está costando más por una causa especial, por lo que hasta que vuelva la normalidad me veo obligado a renunciar a ella). Me sorprendo cuando el tío me ve entrando y me dice "Hey, tío, ¿viste que te mandé por Facebook que llegó ECC?" Y eso fue el principio de una larga conversación de 25 minutos en las que hablamos de las ediciones que realiza ECC, preferencias personales de cada uno, puesta en común de nuestra afición a Grant Morrison, comparación de tiendas... En definitiva, hace tiempo juzgúe mal a ese tio y en días como estos me arrepiento y me doy cuenta de muchas cosas, ya hablaré de esto en su respectivo FrikiAnálisis. Tercer golpe de suerte.
Yendo a coger la guagua, creí que iba a estarme solo durante el camino haciendo véte a saber qué (leyendome la Liga de la Justicia #18 o el Green Lantern del mismo número, jugando a Angry Birds...) Y cuál es mi sorpresa al ver que mi amiga Blanca, propietaria del blog In my Dreams You Will always Stay (sítio muy poético, tipo las cosas que le molan a mi señora Wonder Woman) va a ir en la misma guagua que yo. Así nos pasamos todo el viaje hablando y hablando, haciendo del viaje algo mucho más ameno. Cuarto golpe de suerte
Al llegar a la parada y despedirme de ella, voy a la máquina expendedora de la estación y voy a pillar uno de esos bocatas de paquete por 1,20 euros. Los meto, pulso el número del bocata y... Se quedó al filo, a punto de caer, pero estático. Me cagué en la puta y miré para atrás. Al ver que la guagua no salía aún, decidí agitar la máquina hasta que cayera mi bocadillo. Y cúanta fue mi suerte que no sólo cayó mi bocadillo, sino que también cayeron una chocolatina y un paquete de Skittles (o como mierda se escriba, nunca me han gustado). Al final me salió baratísimo todo. Quinto y último golpe de suerte del día.
En resumen, el día ha sido normal, pero ha tenido un aura de buen rollo y fortuna que me ha encantado, ha sido muy especial a su manera. Y tambien encuentro todo un poco raro, por lo que es merecedor de entrar en los anales de Momentos Bizarros.
¡Hasta la próxima bizarrada!
sábado, 5 de octubre de 2013
jueves, 3 de octubre de 2013
Por aquellos que se rieron de nosotros...
Aún recuerdo cuando Pedro Parques se metía con Sarman diciéndole "enano" y esas cosas. Sin embargo, siempre se refirió a nosotros, sus amigos, de forma irónica con el calificativo de "Tu horda de superbloggers". Sarman dijo que iba a hacer una foto así para hacerle un ZAS EN TODA LA BOCA. La hizo, y bien guapa que estuvo, pero no casó con el concepto que yo me hice en mente. Por tanto, me he tomado la libertad de crear la:
Y sus miembros son:
Y sus miembros son:
- AquAtún: Su pelo extrañisimamente rubio y su "detodasformismo" le han convertido en el maestro de los mares del lugar. Tiene a su mando un gran ejercito de soldados llanoparrenses y es un feroz batallador.
- Forelli: Le pegó cuatro cachetadas a los Guardianes del Universo y les sacó la fórmula para crear anillos. Tiene todo el poder del espectro emocional, pero siempre se le suele ver con su anillo favorito (y el más efectivo): el de los Sinestro Corps. Con sus bizarras e ingeniosas creaciones le da fusta a todo aquel que se cruce.
- Wonder Sarman: Este titán fue creado a partir de un maniquí en una tienda de ropa. Lo feo es que se equivocaron de maniquí y por eso tiene el cuerpo de una tiarrona de mucho cuidado. Con su Lazo del Culturismo y la Espada de la Dieta pone a todos rectos como velas (y con sus tetas también, dicho sea de paso).
- Kal-El: El verdadero Superman, al ver que la zona estaba plagada de coyos, se puso en contacto con Forelli y decidió unirse al grupo. Al ser quien más experiencia tiene en batalla, es una especie de lider, pero realmente son todos iguales en cuanto a poder y derechos.
- BatMáximum: El cerebrito del grupo. Si le preguntas cuántos mocos tiene en la nariz el rey Chindasvinto Marajáh III de la antigua Yugoslavia, te lo dice sin pestañear. Al poseer poco más que su vasto conocimiento, desarrolla estrategias y pega leches como panes.
- Cashlo: El velocista. En el día a día se hace pasar por cojo cardíaco para que no sospechemos, pero realmente es el responsable de que el mundo no se haya destruido ya.
- Kurumyborg: El experto en máquinas. Sabe cómo piratear la dentadura postiza de la abuela de Obama para que nos diga cuántos negritos mueren al día en China. Es también el contacto del grupo con el resto del mundo. Normalmente es un mente fría, pero cuando se junta con Forelli se desmadra lo que no está escrito.
Ahora sabes que existen, pero... ¿Cómo se juntaron semejantes elementos, y más para proteger algo, cuando ellos son más de armarla gorda? Pronto lo descubriremos en The Voice Of Truth IS HERE!
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miércoles, 2 de octubre de 2013
Cómo me va por la Uelepegesé (Universidad de Las Palmas De Gran Canaria)
Para el que me conozca, lo que voy a decir aquí no es una sorpresa. Para el que no esté tan al dia conmigo, he de comentarle que hará como unas 3 semanas comencé las clases en la Facultad de Filología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (Sí, esa que está enfrente del Obelisco). Para ser más exactos, estoy haciendo la carrera de Lenguas Modernas, en la optativa de Inglés-Chino. Esta carrera fue la única opción que tenía, pues por arte de magia desapareció la Filología Inglesa, se cambió el nombre a Estudios Ingleses y ese grado sólo se imparte en Tenerife. En un principio quise irme allí, pero dada la imposiblidad de mantenerme allí (alojamiento y comida), tuve que conformarme con la carrera y universidad anteriormente mencionadas.
En cierta parte, esta carrera es mejor para mí, puesto que siendo mi objetivo dedicarme al cómic de forma profesional (principalmente como guionista, pero si no sale bien me gustaría ser traductor o lo que pueda) el conocer en profundidad no solo las culturas anglosajona y estadounidense, sino también la cultura y las costumbres chinas me pueden dar mucha más inspiración, conocimiento y juego a la hora de escribir sobre según qué temas. Sin embargo, en un principio sentía pesar porque me iban a sobrecargar con chino y tal. Estaba muy, pero que muy equivocado. Es, junto con inglés, la asignatura en la que más estoy aprendiendo.
Creí que desde el primer día nos iban a reventar a deberes, a marcar, marcar y marcar cosas sin tino alguno, a ponernos exámenes a cascoporro y todo eso... Eso aún no ha sucedido, por fortuna, aunque me temo que ocurrirá conforme pasen los meses. No obstante, y como iba diciendo, creía que la dinámica de las clases en el Campus iba a ser distinta a la que se tenía en el instituto... Y realmente no es así, no en mi carrera al menos. En mi clase hay problemas equiparables a los que tenía en el instituto, si no mayores: instalaciones poco adecuadas, calor inmenso, algún que otro profesor cretino y/o pesado... En resumen, cosas a las que estoy más que acostumbrado (por suerte o por desgracia) y puedo lidiar. El problema viene en cuanto al calendario educativo. Sí, vale, somos casi 60 alumnos, tenemos clase de 2 a 7 de la tarde y libramos los viernes, pero no es oro todo lo que reluce.
Para empezar, ahora nos puntúan por asistencia. Sí, señores, ASISTENCIA. Hay que asistir obligatoriamente al menos al 75 por ciento de las clases para poder aprobar las asignaturas, cuando antes con aprobar los exámenes tenías más que suficiente. Luego está que ahora el curso se divide en dos semestres. Semestres... que realmente duran menos de 4 meses, y no habría problema de no ser porque tenemos que dar 5 asignaturas para ponernos en el siguiente semestre con otras 5 totalmente distintas. Y encima es que hay una asignatura totalmente inútil: Estrategias para el Aprendizaje de Lenguas Modernas, donde supuestamente se nos enseña a aprender, tal y como supuestamente hacía esa asignatura que en los institutos se nos da a elegir como alternativa a Religión. No servía de nada entonces y no sirve de nada ahora. Si estamos ahí es porque se nos dan bien las lenguas, no jodas. No necesito que nadie me enseñe a estudiarlas.
En cuánto a la gente, como en todos lados: Hay algunos que no sé cómo han llegado ahí y otros con los que me llevo bien y otros con los que no tengo contacto, así que me encuentro solo en clase como sucedió en Bachillerato. Sin embargo, no todo es tan malo como pintan. He conocido a gente con intereses más o menos comunes. Incluso he tenido el placer de conocer a un tío con el que puedo hablar a un buen nivel de cómic y de películas de las mismas. Sin embargo, nada como mi gente: Sarman, Caslo, Maximum, Caslo, Tachú, Oropez...
En resumen, estoy bien dentro de lo que cabe, pero me estoy cagando en la tremendísima puta por el Plan Bolonia de lo mierda que es y de cómo ha jodido el sistema educativo. Esperemos que la cosa cambie un poco en los próximos meses.
Para empezar, ahora nos puntúan por asistencia. Sí, señores, ASISTENCIA. Hay que asistir obligatoriamente al menos al 75 por ciento de las clases para poder aprobar las asignaturas, cuando antes con aprobar los exámenes tenías más que suficiente. Luego está que ahora el curso se divide en dos semestres. Semestres... que realmente duran menos de 4 meses, y no habría problema de no ser porque tenemos que dar 5 asignaturas para ponernos en el siguiente semestre con otras 5 totalmente distintas. Y encima es que hay una asignatura totalmente inútil: Estrategias para el Aprendizaje de Lenguas Modernas, donde supuestamente se nos enseña a aprender, tal y como supuestamente hacía esa asignatura que en los institutos se nos da a elegir como alternativa a Religión. No servía de nada entonces y no sirve de nada ahora. Si estamos ahí es porque se nos dan bien las lenguas, no jodas. No necesito que nadie me enseñe a estudiarlas.
En cuánto a la gente, como en todos lados: Hay algunos que no sé cómo han llegado ahí y otros con los que me llevo bien y otros con los que no tengo contacto, así que me encuentro solo en clase como sucedió en Bachillerato. Sin embargo, no todo es tan malo como pintan. He conocido a gente con intereses más o menos comunes. Incluso he tenido el placer de conocer a un tío con el que puedo hablar a un buen nivel de cómic y de películas de las mismas. Sin embargo, nada como mi gente: Sarman, Caslo, Maximum, Caslo, Tachú, Oropez...
En resumen, estoy bien dentro de lo que cabe, pero me estoy cagando en la tremendísima puta por el Plan Bolonia de lo mierda que es y de cómo ha jodido el sistema educativo. Esperemos que la cosa cambie un poco en los próximos meses.
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