La Crítica del Mes (Enero 2015): Libertad, por favor...

Una de las polémicas portadas de la revista.
En ella, se retrata a un agente de ISIS
decapitando al propio profeta Mahoma

Bueno, no es por hacer leña del árbol caído, pero parece ser que éste 2015 está siendo bastante benevolente conmigo hasta el punto en el que me pone en bandeja un tema para la primera Crítica de este año 2015. Creo que todos estamos más que enterados de lo acaecido en la capital de Francia con los doce muertos y once heridos que dejó el atentado a la revista satírica Charlie Hebdo (una revista que vendría a ser el equivalente de El Jueves o Mongolia aquí en España), por lo que no perderé tiempo hablando de ello. Y no, no voy a defender a la revista ni voy a criticarla. No he leído nunca dicha revista y, en consecuencia, no puedo opinar. Además, que no se puede juzgar a una publicación entera sólo por sus portadas, cosa que creo que mucha gente creo que no sabe. Por esa regla de tres, los libros con una bonita portada son todos best-seller... Ah, no, que también es así. Puta sociedad de mierda ésta... 

Aquí tenemos a la chica. Sí, tiene las bubis
operadas, pero sigue siendo una belleza de mujer

Sin embargo, hay algo que quizás no es tan conocido por el público (porque en mi opinión no les serviría a los medios para su constante bombardeo de odio hacia el Islam), y es que no hace mucho que ha entrado en escena una actriz porno libanesa llamada Mia Khalifa que ha levantado ampollas (y sin "am-" también, que la niña está muy rica) entre los más conservadores de su país de origen. Nacida en 1993, emigró a los Estados Unidos con sus padres en el año 2000 y más tarde se gradúa en Historia por la Universidad de Texas. No es hasta octubre de 2014 que entra en el mundo del porno bajo el nombre de Mia Callista (se supone que ninguno de los dos es su nombre real, que aún no se ha hecho público) en la productora Scoreland. Recientemente ha dado el salto a BangBros, una de las grande productoras estadounidenses donde ha recibido su actual nombre y ha realizado el que es hasta ahora su video más polémico. En él, la actriz que ya encabeza el primer puesto en la prestigiosa Pornhub junto con la actriz Julianna Vega (una cubana en el papel de su madre, supongo que no había nadie más que se pareciese a una mujer musulmana de unos 30 y largos años) se trincan a su novio. Hasta ahí todo normal de no ser porque le hacen las mamadas con los hiyabs puestos, y el hiyab es una prenda que se supone simboliza modestia y pureza según el Corán. A continuación, podrán apreciar una foto poco reveladora sobre el asunto (lo siento, pero si pongo carne los falsos de Google podrían cerrarme el blog):

Juliana Vega, el tipo del vídeo (no me he molestado en investigar quién es porque no viene al caso) y Mia Khalifa

¿Qué tienen en común éstas dos noticias más allá de que las dos están relacionadas con la religión musulmana y que una ha servido de combustible para alimentar la llama de la otra? Pues en que las dos uno o más grupos de la sociedad han puesto el grito en el cielo y han llegado a cosas peores (atentado en el caso de Charlie Hebdo y amenazas de muerte en el caso de Mia Khalifa) para coartar la libertad de alguien o algo. Y no se equivoquen, como dije antes, no vengo a dejar a nadie como mártir aquí (además, Khalifa ha demostrado tener la fortaleza suficiente como para defenderse ella solita, no como la actriz que se suicidó hará cosa de medio año) ni a meterme con la religión islámica (aunque sí condeno el extremismo de la misma al igual que condeno los extremismos de cualquier religión). Vengo a decir que yo veo mal que se restrinja la libertad de nadie y menos mediante el miedo más retrógrado y cavernícola. Y para más precisión, voy a referirme específicamente a cada asunto:

• En el caso de Charlie Hebdo: Señores, puede que su religión impida retratar al profeta, pero ellos no son practicantes de dicha religión, por lo que es como si yo me enfadase con ustedes por llevar camisetas de Batman. Vale, que la gente también se pasa un poco cuando retrata a Mahoma y puede ser que lleguen al punto de humillarlo, pero eso no les da derecho a matarlos. De acuerdo, puede llegar a ser de mal gusto, pero ellos pueden expresar sus ideas así como ustedes pueden expresar las suyas. Además, ¿por qué no prueban a combatir el humor con humor? Busquen el capítulo de South Park donde parodian a Padre de Familia (concretamente la segunda parte de dicha trama) para que vean a lo que me refiero. Si no son capaces de hacer eso, simplemente pasen de ellos y vivan felices. Aunque quizás ustedes no hicieron nada, que todo fuera una operación de bandera falsa... Pero eso es harina de otro costal.
• En el caso de Khalifa: a ver, la chica nació en Beirut, vale, pero quitando eso lleva 15 de los 21 años que tiene viviendo en Estados Unidos, por tanto ella no tiene que andar preocupándose de lo que a ustedes les parezca bien o mal. Además, ella y solo ella decide qué quiere hacer con su cuerpo, y si con ello la chica paga las facturas, pues mejor que mejor. Además, como ella misma dijo en un tweet recientemente, ¿no tienen nada mejor que hacer que acosar a una chica que tiene el legítimo derecho a hacer lo que le salga del burka cuando en el propio Líbano tienen una situación política de cuatro pares de cojones y a ISIS campando a sus anchas? Es más, seguro que si hubiese sido un tío estarían tirando voladores. ¡Anda ya, manada de toletes! Y a la familia de ésta chica, quienes empezaron todo el revuelo, me limitaré a preguntar retóricamente: ¿Ustedes son bobos?

En fin, lo que quiero decir es lo siguiente: Creo que todos tenemos derecho a expresar lo que pensamos. Sí, el humor sólo pretende ser crítico a la par que divertido y sí, el respeto es importante, pero últimamente la barrera entre chiste e insulto es tan fina y movediza que no tiene sentido que me moleste en hablar de ello. Asimismo, tenemos el derecho de hacer lo que queramos sin que la gente esté amargándonos sólo porque no les guste lo que hacemos. ¿Que no te gusta? Vale, pero deja de dar por culo. Vive y deja de vivir. Si todos la aplicáramos, éste mundo sería mucho más feliz.