Esta sección se la dedico a Marcos Palacios, compañero que me presta bastante apoyo y que sé que echa muchísimo de menos los Momentos Bizarros.
Tengo un amigo al que conocí, de forma indirecta, gracias a Joshy Pig, y ese amigo es Christian. Es muy conocido por la Comunidad Blogger. De hecho, es el único miembro de la Comunidad que no tiene blog, cosa cuanto menos extraña. En fin, para no enrollarme, que éste hombre es un miembro veterano de la Mafia Llanoparrense y, técnicamente, el primero con el que me puse en contacto (Por Messenger, imagínense la cosa). La cosa es que invité a este buen hombre a mi cumpleaños debido a que hacía bastante que no le veía el pelo y quería volver a verle. En cierto momento, caída ya la noche, me dijo que fuéramos con Caslo al coche para enseñarme Soft-Combat (Para el que no sepa qué es, viene a ser jugar a duelos medievales con armas de gomaespuma) y nos pasamos el resto de la velada luchando con palos de sombrilla. Al día siguiente, quedamos Carlos, Christian, Sarman, Nugaya y yo para ir a la playa, y creo que fue ahí (si no en la misma fiesta o en la Batalla de Flores de Guía, que fue después de todo eso) cuando Chris me dijo que se celebraría un Torneo de Soft-Combat en el Parque Doramas el sábado siguiente. Me gustó la idea y acepté en ir.
Llegado ese día, me encontré en la tesitura de que no tenía pantalones cortos para luchar a excepción de uno que hacía tiempo que no me ponía y que, como mas de un pantalón que he tenido durante toda mi vida, estaba roto por la zona del punto de cruz. Sin más dilación salí de casa, cogí la guagua y me dirigí al parque. Al poco de encontrarme tanto a Christian como a Pipon (Yonathan, su primo) empezamos los combates libres (Combates que se hacen con el simple motivo de divertirse y entrenar para el Torneo, de paso). En mi segundo o tercer combate me tocó contra un tipo enorme y bastante simpático de nombre Fran (o eso creo). En todo caso, en medio del combate, mi ya maltrecho pantalón acabó por romperse, dejando al descubierto la cara interna de mis muslos y mis calzoncillos, que para colmo estaba agujereado y se me salía una pequeña parte del forro de los cojones por dicho agujero.
AVISO: SI ERES DE LA TÍPICA GENTE QUE DICE "AY, QUÉ ASCO" POR CUALQUIER COSA, NO ABRAS LA FOTO, QUE DESPUÉS LOS LLORIQUEOS ME LOS TENGO QUE TRAGAR YO. AVISADO ESTÁS.
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Mira lo que asoma bajo el sol... (Chúpate esa, Facebook)
Aquí acabaría el problema de no ser porque tengo los muslos bastante grandes y, al caminar, se me pegan. normalmente suelo tenerlos protegidos por el pantalón o un calzoncillo, pero en ésta ocasión mi muslo derecho estaba a la intemperie y, por tanto, en continuo roce con la tela que tapaba mi muslo izquierdo. Ya de por sí ésto empezó a hacerme daño durante el transcurso de la tarde y me terminó matando cuando tuve que ir caminando hasta la casa de Pipon con Christian para que él recogiese sus cosas y a esperar a que su madre nos recogiera y llevara a Gáldar. En resumen, fue un día bastante entretenido, pero muy raro y bastante doloroso.
En esta posición están perfectos para hacerles un photoshop de los míos, me cago en Dios... (Pipon es el de las gafas, Christian el que más cerca está de la cámara)
Christian tó sexy de espaldas
"Vamos, hazme esa trenza. Entro en combate dentro de 15 minutos"
Christian estaba practicando mi ancestral técnica de sacar las fotos a traición... Y parece que se le da bien.
En ésta foto se puede apreciar el paupérrimo estado de mis pantalones... Imagínenme caminado así por Las Palmas a punto de morir sollado
Aquí Christian fue poseido momentáneamente por el espíritu de Josué el Hippie, gran amigo de la Mafia Llanoparrense
Bueno, espero que se hayan gozado esta extraña aunque insustancial vivencia mía, aunque es lo más raro que me ha pasado en bastante tiempo (al menos, que pueda contar en público). Si en algún momento vivo otra situación extraña o recuerdo alguno del pasado, no duden que estará expuesto aquí.
Gracias por leer y...
¡Hasta la próxima!
Mira lo que asoma bajo el sol...
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