FORELLI HA VUELTO

Señores, primero que nada quiero disculparme por las largas ausencias que estoy teniendo tanto con el blog como en la radio. Como saben (y a pesar de la creencia de otr@s) tengo que estudiar. En la fecha en la que esta entrada está siendo elaborada, me encuentro en los exámenes finales del segundo semestre de la Universidad, y eso quita un huevo de tiempo. Para no caer pesados, voy a dejar este tema ya zanjado y voy a lo que de verdad me trae a darle a las teclas de nuevo ante ustedes...

El título tiene un sentido en cierto modo. Puede parecer que nunca me he ido (y la verdad es que nunca lo hice), pero he de admitir que no he sido yo mismo. Tenía muchos factores que influenciaban para ello, pero el principal era el hecho de que tenía pareja. Una pareja que sí, la quería con locura, pero que no era del todo compatible conmigo. No voy a meterme en detalles, pues ésto es algo concerniente a mi vida privada y no es cuestión de airearlo, pero creo que se sobreentiende qué ha pasado con ella. Los descubrimientos que he hecho últimamente me han hecho ver muchas cosas sobre ella y lo nuestro. Creerá que ha ganado y me ha humillado, pero no lo ha hecho. No estoy cabreado, no estoy triste. Me he quitado un peso (y muy gordo) de encima, por lo que creo que debería estar hasta feliz, creo yo. Y de hecho, estoy bastante contento tras hacer algo de recuento y ver que salgo ganando.

 No voy a caer en su juego, no voy a ponerme a insultarla por aquí (eso le daría lo que quiere, atención) ni nada por el estilo. Sólo quería decir con esto que la cuerda que ataba a Forelli para que no saltara y fuera a por todas se ha casi cortado y yo he terminado por darle un machetazo. Se acabó la represión, se acabó la censura, se acabó la bobería. Forelli vuelve a su trono, por mucho que digan lo que sea que digan. Sin nadie que me chupe la sangre y las energías vitales (además de que la universidad empieza a desvanecerse) me siento puro, feliz y en forma. Las ideas vuelven a fluir y el Estilo Forelli hará gala de presencia más pronto que tarde. Para muestra, un botón: voy a terminar esta declaración de intenciones pidiéndoles que por favor, reproduzcan esta canción. Creo que el mensaje que prentendo mandar quedará muy claro (y si no, veánse la letra aquí):

Pues lo dicho, todos los detractores que me estén viendo ahora mismo, sólo les puedo decir que me chupen la polla tantas veces hasta que se ahorquen en sus propios fluidos corporales. Y a los asiduos Forelliófilos, (es decir, ustedes) a esperar cómo Forelli vuelve a la acción con más ideas, reseñas, VOT, Forelli Opina y mucha incorrección política.

¡Hasta la próxima!